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Pimientos asados |
- 4 pimientos rojos grandes,
- sal gorda.
Preparación:
Lavar los pimientos y secarlos muy bien. Es importante que estén muy secos para que no se quemen.
Ponerlos en una bandeja del horno. Yo suelo forrar la bandeja con papel de aluminio para luego aprovechar mejor el jugo que sueltan los pimientos al asarse. Añadir un poco de sal gorda por encima de los pimientos y también por la bandeja.
Meter en el horno precalentado, a 180ºC, con calor arriba y abajo, unos 40 minutos.
Darles la vuelta de vez en cuando para que se hagan uniformemente y no se quemen.
Cuando estén asados, sacarlos del horno y dejar enfriar. Para quitarles la piel fácilmente se puede tapar la bandeja con papel de aluminio, una vez que los hemos sacado del horno, y así el vapor que se genera hace que la piel comience a desprenderse. Si los dejas enfriar del todo no cuesta nada pelarlos sin necesidad de taparlos. Abrir los pimientos y retirar el tallo y las semillas. Partirlos a tiras. Se conservan muy bien durante varios días si los cubres con el jugo que han soltado y un poco de aceite de oliva.
Los pimientos asados son la base de muchas recetas como puede ser un buen salmorejo de pimientos.
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